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21/11/01 - 860

Aseguran la continuidad del Programa Pro Huerta


El secretario de Políticas Sociales del Ministerio de Desarrollo Social y Medio Ambiente de la Nación, doctor Rafael Peñoñori, garantizó la continuidad del Programa Nacional Pro Huerta que con aportes de ese ministerio y la colaboración del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria contribuye a la seguridad alimentaria de más de 2.600.000 habitantes del país que se encuentran en situación de pobreza estructural o por debajo de la línea de pobreza.

 

Peñoñori dio seguridades sobre el mantenimiento del Programa durante una entrevista que mantuvo hoy con el presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), ingeniero Dardo Chiesa, y el ex presidente Arturo Navarro, quienes concurrieron a su despacho para solicitarle que intercediera por el mantenimiento del mencionado programa frente a la profunda reestructuración a la que está siendo sometido el gasto social.

 

El Pro Huerta viene desarrollándose desde 1990 y su formulación apuntó a la búsqueda de soluciones al preocupante problema de la reducción del consumo y la monotonía alimentaria, particularmente de alimentos frescos, en hogares pobres.

 

Hoy, 2.120.000 personas complementan su alimentación con los productos que obtienen de 424.706 huertas familiares desarrolladas hasta marzo último; otras 140.998 personas se abastecen de huertas comunitarias y 422.794 niños de huertas escolares. Asimismo, se instalaron 58.700 granjas familiares, más de 1000 escolares y 60 comunitarias con aves de corral, frutales y conejos.

 

Cabe señalar que las técnicas aconsejadas por el INTA permiten que una huerta familiar para cinco familias con una extensión promedio de 100 metros cuadrados produzca a lo largo del año más de 200 kilogramos de hortalizas y otros productos de granja. Las huertas son trabajadas y cuidadas por los propios interesados, lo que contribuye al mantenimiento de su dignidad y al aprovechamiento de mano de obra de costo cero, ya que se trata generalmente de desocupados, amas de casa o jubilados con bajos ingresos.

 

La continuidad y eficiencia del Pro Huerta, con el que colaboran organismos provinciales, municipios, organizaciones de base, hospitales, centros de salud y entidades religiosas, han sido destacadas por personalidades como el obispo Jorge Cassaretto, presidente de Caritas, y el economista Juan Alemann.

 

Buenos Aires, Noviembre 21 de 2001.


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