El Campo espera rectificación de los impuestos confiscatorios
Una de los primeros indicios de recuperación de la economía se está dando a través de los productores agropecuarios, que a pesar de las retenciones, han aprovechado las mejoras de su situación para reinvertir en sus establecimientos, resucitando pueblos e industrias que estaban desapareciendo.
Pero nuevamente tendrán que volver a la improvisación sin poder planear para el futuro. La ineficacia de la política fiscal frenará la producción, y por ende todo desarrollo unido a ella.
La ganadería para hacer frente al Impuesto a las Ganancias deberá reducir su capital en un 20%, dado que ha sido la inflación la que ha aumentado su capital. Volvemos a un achique de los rodeos cuando estamos recuperando mercados a quienes exportar.
Las alícuotas de IVA diferenciales ponen en riesgo la próxima campaña agrícola, con el consiguiente desaliento en la inversión tecnológica, en desmedro de las exportaciones y por lo tanto de las divisas que el país necesita.
Esperamos que las autoridades entiendan que esto excede el marco de un justo reclamo. La presión fiscal inequitativa y abusiva se cierne sobre el único sector que ha tenido capacidad para reaccionar rápidamente y poder revertir la situación de toda la economía.
La inquietud en la producción crece, una vez más nos sentimos traicionados. Exigimos respuestas rápidas y certezas para saber si seguiremos produciendo como lo hemos hecho, o debemos tomar medidas mas drásticas e inmediatas.
Buenos Aires, Febrero 18 de 2003.