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20/12/05 - 1011

Cada vez mas lejos de las 100 millones de toneladas


CAYO UN 4 % EL USO DE FERTILIZANTES

"...esta es la verdadera historia..."

"...Quien quiera oír que oiga..."

 

Lamentablemente las advertencias que otrora hiciera CARBAP sobre la caída del consumo de fertilizantes, han sido confirmadas por la Cámara Argentina de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes, que agrupa a las empresas proveedoras de fertilizantes (CASAFE).

 

La superficie sembrada de trigo y maíz ha disminuido en 2 millones de hectáreas, siendo estos dos cultivos los responsables del 70 % del consumo de fertilizantes y en particular de los fertilizantes nitrogenados como la urea.

 

Esta disminución en el consumo surge como respuesta natural del productor agropecuario a la falta de rentabilidad  de estos cereales, que se ve agravado por la alta inversión por hectárea, necesaria para su implantación.

 

Los impuestos a la exportación (RETENCIONES) actualmente vigentes tanto en trigo como en maíz hacen inviables económica y productivamente el desarrollo de estos cultivos, y mas aún si se quisiera aplicar la última tecnología.

 

Tampoco acompañan los costos de los fertilizantes. El precio de la urea argentina aumentó 100 U$S por tonelada durante el último año, situación denunciada por CARBAP en la Secretaria de Defensa de la Competencia. Denuncia que después de idas, vueltas, y mucho tiempo, fue desestimada.

 

En este escenario, los cultivos que aumentaron el área de siembra son la soja y el girasol, donde sólo se usa el 14 % del consumo total de fertilizantes, a pesar de ser los que más nutrientes extraen por unidad de producto.

 

Esta claro hoy, que las fuertes exportaciones de ambos oleaginosos llevan implícito en el valor una gran parte del capital suelo del productor argentino.

 

Sin duda existe una descapitalización encubierta del productor, cada vez que se deja de aplicar fertilizantes, para que "cierren los números", tanto en trigo como en maíz. Estas situaciones arbitrarias necesitan de políticas activas por parte de la SAGPYA,  hoy ausente, preocupada únicamente en temas coyunturales.

 

La sustentabilidad del sistema necesita de un lógico equilibrio entre los nutrientes que se extraen y se incorporan.

 

Hoy, como ya hemos advertido desde CARBAP, el balance es negativo y la sustentabilidad del sistema esta en juego.

 

20 de Diciembre de 2005


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