Debe resguardarse el patrimonio de los productores

La salida de la "convertibilidad" parece ser el único camino que le queda al Gobierno para superar la honda crisis económica y social en la que nos encontramos sumergidos después de casi cuatro años de creciente recesión.

De optarse por esa alternativa, la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) requiere de las autoridades nacionales, legisladores y responsables de la política monetaria y financiera que se adopten los recaudos necesarios para que las deudas de los productores contraídas en dólares sean transformadas a pesos, ya que de lo contrario se provocaría la quiebra en cadena del sector.

Este se encuentra hoy con un endeudamiento bancario que redondea los 7.000 millones de pesos, a los que se suman 4.000 millones con el sector comercial. Cerca de 14 millones de hectáreas se encuentran hipotecadas solamente en el Banco de la Nación Argentina y otras 5 millones comprometidas con restricciones patrimoniales, lo que representa más de la mitad de la superficie agrícola de la Argentina.

No pedimos ningún privilegio, sino que se considere simplemente que el sector agropecuario fue el que soportó estos últimos años de crisis sin recibir ningún subsidio ni beneficio de otra naturaleza, pese a lo cual continuó incrementando sus inversiones -más de 4.000 millones de pesos por año además de ocupar 1.200.000 puestos de trabajo- y los volúmenes productivos comprometiendo para ello su patrimonio. Tal esfuerzo ha permitido que, a pesar de la caída de los precios internacionales, siga siendo el mayor aportante de divisas genuinas al país.

Buenos Aires, Diciembre 19 de 2001.