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04/09/02 - 902

No deben demorarse las obras para prevenir inundaciones


Frente a la grave emergencia hídrica que padecen 65 distritos de las provincias de Buenos Aires y La Pampa y en vista del afianzamiento de las posibilidades de que ocurra un nuevo fenómeno Niño con un incremento de las lluvias a partir de la próxima primavera que agravaría aún más la situación, la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) expresa su preocupación por la ausencia de obras que controlen el ingreso de aguas desde otras jurisdicciones y faciliten el escurrimiento de las mismas mediante el dragado de los cauces a partir de la desembocadura del Salado.

 

Las excesivas precipitaciones que inundaron buena parte de las dos provincias provocando gravísimas pérdidas económicas y de vidas humanas llevaron el año último a la creación de un Fondo Hídrico que proyectaba recaudar 220 millones de dólares que se van erosionando como consecuencia de la devaluación, sin que se hayan encarado aún los trabajos que con urgencia reclaman los productores y los pobladores del interior.

 

Asimismo, preocupan a CARBAP los permanentes desvíos de los recursos asignados a dicho fondo, ya que no sólo se desvirtúan los motivos que dieron lugar a la creación de un impuesto adicional sobre la nafta súper y el gas natural comprimido sino que va demorando la ejecución de trabajos que hace años deberían estar realizados y que sólo movilizan la sensibilidad de las autoridades cuando se está frente a una catástrofe.

 

CARBAP reitera la urgente necesidad de concretar estas obras y pone de manifiesto la unanimidad de los productores de los 65 distritos afectados (58 en Buenos Aires y 7 en La Pampa) en cuanto a que los trabajos deben incluir la concreción de obras aguas arriba para controlar el ingreso de aportes hídricos de otras provincias; mejorar el dragado de las vías de drenaje comenzando desde su desembocadura, y asegurar que los recursos del fondo fiduciario tengan como único destino la realización de estos proyectos.

 

Buenos Aires, Septiembre 4 de 2002.


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