La inundación volvió a Buenos Aires

Las inundaciones que afectan a la provincia de Buenos Aires y que tienden a agravarse día tras día determinaron que la Comisión de Emergencia y Desastre Agropecuario de la Provincia de Buenos Aires propiciase ayer la prórroga, hasta el 31 de octubre próximo, de la declaración del estado de emergencia y desastre individual vigente para los partidos de General Alvear, Bolívar y General Viamonte.

Asimismo, el cuerpo recomendó al Ejecutivo provincial la declaración de la emergencia y el desastre individual por inundación respecto de otros treinta partidos y el sector de islas de siete distritos riberenos, de acuerdo con este detalle:

Entre el 1-5-98 y el 31-10-98, los partidos de General Villegas, Florentino Ameghino, General Pinto, Leandro N. Alem, Lincoln, Carlos Tejedor, Trenque Lauquen, Pehuajó, Carlos Casares, Nueve de Julio, Veintinco de Mayo, Hipólito Yrigoyen, Daireaux, Alberti, Chivilcoy, Ramallo y Bragado, que ya se encuentraban bajo los beneficios de la ley hasta el 30 de junio de 1998.

Del 1-5-98 hasta el 31-10-98, las parcelas rurales inundadas Roque Pérez, Mar Chiquita, General Pueyrredón, General Alvarado, San Cayetano, Benito Juárez, Necochea, General Lamadrid, Laprida, Guaminí, Tapalqué, Las Flores y Saladillo, además del Sector Islas de Zárate, Campana, Baradero, San Nicolás, San Pedro, Tigre y Escobar.

Por otra parte, se observará la situación de los partidos de Coronel Pringles, General Belgrano, Lobería, Tandil, Ayacucho y Pila.

Antecedente

Las recomendaciones fueron aprobadas durante la reunión que presidió el ministro de Asuntos Agrarios, Eduardo Althabe, y en la que el representante de las Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), junto con los de Coninagro y la Federación Agraria Argentina, dieron un pormenorizado informe de cómo afectan las inundaciones a la producción rural.

Presidentes de catorce sociedades rurales del centro-oeste de la provincia y parte de la cuenca del Salado, junto con los intendentes municipales respectivos y el ministro Althabe, analizaron la semana última en Bolívar los graves perjuicios derivados de las inundaciones, que se traducen en traslados y ventas forzosas de hacienda y en fuertes caídas de rendimientos, cuando no pérdidas totales, en los cultivos de cosecha gruesa.

Allí se acordó que el ministro Althabe gestione en forma urgente una entrevista de los dirigentes rurales con el gobernador Eduardo Duhalde para pedirle la declaración automática de desastre agropecuario y económico de los partidos afectados y la eximición a sus productores del pago del impuesto inmobiliario hasta el primer ciclo productivo posterior a la salida de la emergencia.

También se le solicitará al gobernador que interceda ante la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación para que ésta se interese ante la banca privada de modo que, subsidio de tasa mediante, otorgue a los productores los mismos beneficios que acuerdan el Banco de la Nación Argentina y el Banco de la Provincia de Buenos Aires en funci[on de las disposiciones de la ley de Emergencia Agropecuaria.

Entre esa reunión y ayer, la situación de esa región -Carlos Casares, Hipólito Yrigoyen, Daireaux, Pehuajó, Olavarría, 9 de Julio, Veinticinco de Mayo, Saladillo, Tapalqué, General Alvear, Roque Pérez, Carlos Tejedor, Bragado y Bolívar- se ha agravado y extendido a otras zonas debido a nuevas lluvias y al ingreso de aguas provenientes de San Luis (desbordes del río Quinto) y del sur de Santa Fe, en la zona denominada La Picaza. En este último sector, el agua llega prácticamente a la calzada de la ruta nacional 7, por lo que el tránsito debe realizarse con precaución y se teme que el camino, de incrementarse los aportes hídricos, quede cortado.

Buenos Aires, Mayo 13 de 1998.