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29/01/99 - 769

Con sus amenazas, Silvani agravia al campo


El titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos, Carlos Silvani, volvió a cargar contra el campo al acusar al sector agropecuario de ser el segundo responsable de la evasión impositiva en el país. Frente a las declaraciones del titular de la AFIP al diario La Nación, publicadas el domingo último , la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) puntualiza:

 

Que si la evasión en el sector agropecuario es tan elevada como dice el funcionario, no hubieran desaparecido en menos de diez años 200.000 productores ni otros miles enfrentarían hoy la posible quiebra de sus explotaciones.

 

Que la AFIP dispone de los medios legales y humanos para detectar y sancionar los casos de evasión fiscal, cosa que sería mucho más efectiva que lanzar acusaciones generalizadoras que afectan la dignididad de todos los hombres de campo.

 

Que las entidades agropecuarias han señalado potenciales actores de evasión, desconociéndose los resultados de tales denuncias.

 

Que existen casos paradigmáticos de grandes evasores que están en la Justicia, algunos desde hace años, sin que se conozcan qué acciones adoptó la AFIP para acelerar los trámites legales y recuperar para el Estado las sumas en las que fue defraudado.

 

Que las amenazas de una rebelión fiscal por parte de los pequeños y medianos productores tienen que ver con la imposibilidad real de hacer frente a los constantes cambios y crecientes exigencias de la legislación impositiva. Esto es reconocido por el propio Silvani cuando expresa que a los productores monotributistas se les debió generar el pago de sus aportes coincidiendo con sus ventas. Parece mentira -admitió-, pero no poseen 30 pesos por mes para pagar. Lo elevado de la presión fiscal es aceptado también por el funcionario cuando expresa que quien cumple tiene una carga respetable.

 

Que la amenaza de Silvani ante las expresiones de una eventual rebelión fiscal de embargar y rematar campos de los productores que no paguen sus impuestos debería haber sido reemplazada por un pedido a sus superiores de mayor austeridad en el gasto público y una disminución de los impuestos para que todos puedan pagarlos.

 

Que las declaraciones de Silvani agravian a un sector que, junto con la agroindustria, provee más del 60% del valor de las exportaciones del país y que en estos momentos enfrenta con profunda incertidumbre la aguda caída de los precios internacionales, la retracción de la demanda mundial y la competencia de países que subsidian a sus producciones y sus exportaciones.

 

Buenos Aires, Enero 29 de 1999.


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